Consejo

Hay que tener un extra-especial cuidado con las polillas. Estos animales del demonio se vuelven dementes cuando se les echa encima algo de insecticida, y comienzan a volar por doquier con una energía tan febril que pareciera que sus alas se van a despedazar por el movimiento. Además, se comprueba que su naturaleza es tan vengativa como valiente y agresiva; ya que tienden a lanzarse, así como están: dementes y enérgicas, en contra de las personas (especialmente en contra del agresor que fumigó), simplemente por reclamar un poco de sangre para sus diminutas venganzas; ya que saben que más daño no nos pueden hacer (porque si nomás aprenden como hacerlo... Dios nos libre).
Y por si fuera poco, se siente muy, muy... pero muy feo cuando se meten entre la ropa que uno lleva puesta, nada más para molernos a pequeñísimos puñetazos, y para que aún después de muertas nos dejen sintiendo ñáñaras al recordar que estaban sobre nosotros.

Pinches polillas neta, son animales oriundos del mismito infierno, me cae.





Rolas pa' ahuyentar avispas (favoritas de hoy): "Beautiful", "Uno entre 1000" y "Jugo de Luna" de Gustavo Cerati (sí, amo a Cerati).